¿Alguna vez has sentido un latido en el parpado del ojo? ¿A que se deben estos “tics”? ¿Es signo de algo malo para mi salud? Estas preguntas son las que todos nos hemos hecho alguna vez cuando hemos sentido ese particular “temblor“ en el parpado.
El temblor suele ocurrir generalmente en el párpado inferior y se denomina “blefarotics” y consiste en “fasciculaciones“, es decir, pequeñas e involuntarias contracciones del músculo orbicular de los párpados. Este fenómeno es más frecuente en varones. Las estadísticas señalan que 1 mujer de cada 4 hombres lo padece.
En realidad este fenómeno fisiológico no es un latido sino un temblor que ocurre en el párpado del ojo y la razón por la cual se produce tendría que ver con una “sobrecarga” en la tensión nerviosa, es decir, está vinculada con los nervios que mueven los párpados. Las causas de este temblor son principalmente la falta de sueño y el estrés.
¿El temblor del párpado indica algo malo?
No, en absoluto. No representa ningún riesgo ni peligro para nuestra salud. Aunque si esta molestia persiste y se intensifica es conveniente visitar a un neurólogo.
Otros factores que pueden favorecer la blefarotics son: la desnutrición o la falta de nutrientes en el organismo (como por ejemplo la carencia de magnesio), la hipersensibilidad a la luz, alergias, conjuntivitis y presión ocular. el exceso de cafeína en el organismo y el consumo abusivo de alcohol.
¿En qué casos deberíamos acudir al médico para un tratamiento?
En la mayoría de los casos el temblor del párpado ocurre sólo de manera temporal. Sin embargo, cuando esta molestia se torna constante (persistiendo durante una semana o más), o bien involucra contracción de otras partes del rostro: sea produciendo muecas con la boca o arrugando la nariz, debemos pedir un turno para una visita a un especialista en neurología.
Remedios caseros para curar los temblores en el ojo
La primer recomendación tiene que ver con realizarnos masajes de manera circular con la yema de los dedos sobre la zona afectada. Luego, lávate la cara con agua y deja que permanezca en el rostro por algunos minutos, sin secarte.
También se aconseja sentarse con la espalda recta por algunos minutos en un lugar tranquilo y respirar profunda y lentamente por la nariz y exhalar despacio el aire por la boca. Esta técnica de respiración ayudará a relajar tus nervios.
Finalmente es importante descansar bien. Los adultos deben tomar una siesta de al menos media hora y de 45 minutos a 1 hora los niños. Todo parece indicar que la clave está en llevar una vida más tranquila y reducir los niveles de estrés y cansancio tanto como nos sea posible.
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