Ducharse puede ser una experiencia gratificante pero existen 10 malos habitos en la ducha que deberias cambiar. Descubrelos.
Sin dudas, uno de los momentos mas esperados y relajantes es cuando nos damos una ducha.
Darnos un buen baño es algo refrescante, revitalizador y muy terapéutico para librarnos del estrés diario. Sin embargo, existen varios hábitos que muchas personas tienen al ducharse que pueden resultar muy perjudiciales. Veamos cuales son
10 malos habitos en la ducha que deberias cambiar
No lavarte los pies
Generalmente existe un pensamiento equivocado en muchas personas. Creen que al ducharse el jabon que desciende por el cuerpo lavará los pies sin necesidad de frotarlos. Esto puede ser más comodo para cualquiera pero es un concepto equivocado. Debemos ocupar tiempo lavando nuestros pies. Frotarlos, limpiarnos con una esponja o piedra exfoliante ayuda a remover la piel muerta, revitalizarlos e higienizarlos adecuadamente para eliminar hongos y bacterias.
Lavarse el cabello diariamente
Mucha gente cree que lavarse el cabello a diario es un buen hábito. Sin embargo, hacerlo puede debilitar la fibra capilar. Ademas, estimula más la segregación de grasa. Por esta razón lo conveniente es lavarse el cabello dos a tres veces a la semana.
No ducharse con un poco de agua fria
¿Conoces los beneficios de ducharte con agua fría? Descubrelos Aqui. Hay personas que les da terror hacerlo. Sin embargo, sin llegar a un extremo, puedes aplicar los últimos 20 segundos de tu ducha diaria con agua fria.
Ducharse por demasiado tiempo
Tomar una ducha muy larga en lugar de ser algo saludable puede ser todo lo contrario. Someter la piel a un calor persistente por mucho tiempo puede eliminar la humedad natural de la piel y favorecer su sequedad. Lo recomendable son 10 minutos por ducha.
No darse una ducha luego de hacer actividad física
Realizar ejercicios, deporte o gimnasia produce la eliminación de toxinas, sudor y el consecuente mal olor en el cuerpo. No ducharse luego de ejercitar favorece la proliferación de bacterias. Esto puede causar daño a la piel.
Secarse el cuerpo con torpeza
Luego de cada ducha procura secarte con una toalla suave y acolchada. El modo correcto de hacerlo es dando pequeñas palmaditas suaves. Frotar el cuerpo con rudeza puede provocar la irritación de la piel. Además, secarse al aire favorece su agrietamiento.
No hidratar la piel luego de cada ducha
Por lo general muchas personas cuando terminan de ducharse se van a la cama a relajarse. Lo ideal es aplicarse una crema hidratante aún mientras la piel está humeda.
Envolverse el cabello largo con una toalla
Dicen que esta práctica puede favorecer la calvicie. Lo correcto es dar palmaditas y secar suavemente el cabello, luego descubrirlo y peinarlo. Si, en cambio, lo frotas torpemente, vas a producir nudos indeseables dificiles de alisar posteriormente.
Al salir de la ducha olvidarse la esponja
Al terminar de bañarte, evita dejar tu esponja en la ducha. El contacto de la esponja con el agua permite la proliferación de bacterias. Una vez que hayas terminado de ducharte, limpia a fondo tu esponja, secala adecuadamente y cuélgala en un lugar seco, con buena ventilación.
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No utilices una maquinita de afeitar vieja
¿Cuando fue la última vez que cambiaste tu hoja de afeitar? Es conveniente cambiarla por una nueva con regularidad. Rarusarse con maquinitas de afeitar viejas mientras te duchas no es aconsejable. Esto es debido a la proliferación de bacterias que pueden causar infección.
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